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Pues bueno... se camina raudamente a "los chinos" de la esquina, se compra un adaptador de corriente por 0,60 euros... se acopla al final del cable que nos alimenta de afectos... y se enchufa a los amores descubiertos en el exilio... Quizás no sean tan efectivos como nuestras tomas de corriente en casa.... pero son lo suficientemente buenas para recargar sonrisas y buenos días
3 comentarios:
jojojo ..
que hariamos sin los chinos!!!
Falta poco para que vuelva a sentir la corriente de nuestro hogar
Te amamos
Te extrañamos pequeño... ya vamos de regreso...
Te amamos
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